El concepto inteligencia emocional aparece en la literatura psicológica en el año 1990, con los psicólogos americanos Peter Salovey y John Mayer. Sin embargo, se difundió ampliamente con el libro La Inteligencia Emocional en 1995 de Daniel Goleman.
La inteligencia emocional se refiere a la capacidad para:
- Reconocer nuestras propias emociones y las de los demás
- Discriminar entre diferentes sentimientos y reconocerlos apropiadamente
- Utilizar información emocional para guiar nuestros pensamientos y conductas
- Ajustar nuestras emociones para adaptarnos al ambiente o para conseguir objetivos.
¡Hay varias palabras en negrilla, que me gustan! ¡La primera, es la palabra “capacidad”, esta significa, que podemos aprender en el camino y eso es maravilloso!… no es cierto que estamos destinados a vivir emocionalmente como hasta ahora lo hemos hecho.
La siguiente palabra es “Reconocer” nuestras emociones, es algo parecido a no engañarnos a nosotros mismos, podemos iniciar con el ejercicio de reconocer: “estoy enojada”, “estoy triste”, “estoy feliz”, “estoy furiosa”. El primer ejercicio es mirarlas, darles el protagonismo, sin negarlas o ignorarlas.
La siguiente palabra es “discriminar”, implica el ejercicio de no enmascarar nuestras emociones y llamarlas cada una por su nombre, así no nos guste.
La tercera palabra destacada, “utilizar información” resulta interesante, porque nos muestra el riesgo de quedarnos en lo cognitivo y no pasar a la acción, y justo se trata de aplicar lo que estamos conociendo acerca de nosotros mismos.
La última palabra “ajustar” nuestras emociones, también está relacionada con el accionar de modificar nuestras emociones para impactar lo que pensamos y lo que hacemos en el tiempo y aquí la palabra clave es “tiempo”, porque algo que hicimos en un momento determinado, quizás hoy emocionalmente ya no es útil para nosotros, porque no somos estáticos ni siquiera en nuestras propias emociones.
Si analizamos todo lo anterior, nos damos cuenta que este tema de Inteligencia emocional, tiene que ver más con, comenzar por nosotros mismos en primera instancia, antes de querer cambiar a los demás.
Una persona emocionalmente inteligente es aquella capaz de gestionar satisfactoriamente sus emociones para lograr resultados positivos en sus relaciones consigo misma y con los demás.
Deisa Gonzalez
Psicólogo. Certificada como Coach ontológico empresarial por Newfield Consulting. Programa alta gerencia en Coaching y Fundamental Coaching Skill. Certificado I.C.I. Nro. 6238. Certificación internacional en Coaching (I.C.C. – Idear) Certificado Nro. 10489. Consultor empresarial Socio / Director en Miradas empresariales. @miradasempresariales, www.miradasempresariales.com, deisa.gonzalez@miradasempresariales.com, www.linkedin.com/in/deisagonzalez
Fuentes consultadas:
Fuente: https://concepto.de/inteligencia-emocional/
https://psicologiaymente.com/inteligencia/inteligencia-emocionalhttps://es.wikipedia.org/wiki/Inteligencia_emocional